Tinta China

En este seminario tuvimos que imitar las etapas del garabato infantil, con la ayuda de la tinta china, una pajita y un pincel. Fue una sensación un tanto extraña, ya que la imaginación la teníamos que dejar en blanco, para que no saliesen dibujos exactos, sino que fuesen más libres, pero la verdad es que me resultó divertido ver como luego le podía poner nombre a lo que me salía, porque se acercaba a algún objeto real.

                

Algunas dejaron correr la imaginación demás, llegando incluso a pintarse los pantalones, fue un seminario entretenido a la par de divertido